DOCUMENTO APROBADO POR LA ASAMBLEA ORDINARIA DEL PDP DE FECHA 13/03/2016
QUE ESTABLECE LAS PRIORIDADES POLÍTICAS DEL PARTIDO PARA EL AÑO
La construcción de la UNIDAD:
Nosotros los Progresistas reafirmamos que las reformas políticas, económicas y sociales que necesita nuestro país no las vamos a lograr desde el sectarismo sino en el marco de un gran consenso nacional que incluya tanto a sectores políticos como a las organizaciones de la sociedad civil.
Este acuerdo no debe excluir, debe escuchar las diferentes voces que representan a un país plural. La opinión de todos debe ser valorada y atendida sin distinción de colores ni condición social.
Iniciamos el camino de la ALIANZA para el 2018:
El PDP reafirma su voluntad aliancista. Desde su fundación ha sido un factor relevante para la concreción de las principales alianzas de los últimos años.
En las últimas elecciones municipales hemos apoyado a candidatos de diferentes partidos políticos para las intendencias, y compañeros Progresistas igualmente han tenido el privilegio de encabezar alianzas victoriosas. La experiencia del 2015, al igual que la del 2008, nos señala con claridad que en el 2018 la unidad va a lograr nuevamente el triunfo del pueblo sobre el poder del dinero.
Una candidatura Progresista para la ALIANZA:
En el contexto de una amplia alianza de partidos, movimientos y organizaciones sociales, el PDP impulsará una candidatura PROGRESISTA a la Presidencia de la República, con la convicción de que es nuestra responsabilidad ofrecer a la ciudadanía opciones válidas para liderar el próximo gobierno. La ALIANZA deberá acordar además de un programa, un procedimiento democrático y competitivo para la elección de la candidatura que nos representará a todos.
Recuperar lo perdido, luchar por un PARAGUAY PARA TODOS:
Nuestro país vive momentos difíciles. El presente Gobierno significa un enorme retroceso con relación a las conquistas que hemos alcanzado en décadas de democracia en lo político, social y económico.
HOY LOS PARAGUAYOS ESTAMOS MÁS ENDEUDADOS, MÁS POBRES Y MÁS INSEGUROS. Un Gobierno que por primera vez en la historia del país recibió 500 millones de dólares de su predecesor, que obtuvo la autorización de créditos multimillonarios y de todas las leyes especiales que ha solicitado al Congreso, NO PUEDE MOSTRAR UN SOLO AVANCE.
La paralización de la economía, el aumento de la pobreza extrema y el recorte de los programas sociales, se deben además de la incapacidad de gestión, sobre todo a la falta de sensibilidad social: AL PRESIDENTE CARTES Y A SU GOBIERNO NO LES IMPORTA LA POBREZA NI SE INTERESAN POR LOS DERECHOS DE LOS POBRES.
LOS PROGRESISTAS VEMOS IGUALMENTE CON PREOCUPACIÓN LA CORRUPCIÓN EN EL GOBIERNO. Lo hemos denunciado desde el Congreso y el Partido y en reiteradas ocasiones. Solo por citar algunos ejemplos recordamos los siguientes: dos estancias que el presidente Cartes ocupa con títulos falsos en perjuicio de sus legítimos propietarios; la adjudicación de ACEPAR a una empresa extranjera sin licitación; contratos de empresas de Cartes con el Estado, puntualmente de Aerocentro; contratos de empresas de funcionarios de Cartes con el Estado (ESSAP); sistemáticas adjudicaciones de obras a las ofertas más altas en el MOPC; LOS COTIDIANOS CASOS DE CONTRABANDO QUE AFECTAN A LAS TABACALERAS DEL PRESIDENTE y lo más reciente, la ESCANDALOSA MANIOBRA PARA EVITAR LA EXTRADICIÓN DEL TÍO DEL PRESIDENTE, QUE TIENE UNA CONDENA PENDIENTE POR NARCOTRÁFICO EN PARAGUAY.
El copamiento de las instituciones de control:
La corrupción y falta de transparencia de este Gobierno, ha pasado hasta ahora inadvertida debido a un proceso sistemático de copamiento de las instituciones de control.
De esta manera el Gobierno ha logrado someter a la Cámara de Diputados, al Ministerio Público, al Poder Judicial y más recientemente a la Contraloría General de la República. Solo así se explica que Cartes y su Gobierno se extralimiten de esta manera en el ejercicio de sus funciones y se aprovechen del poder para sus negocios.
La entrega de nuestra soberanía, EL GOBIERNO NO DEFIENDE NUESTROS DERECHOS EN LAS BINACIONALES:
En el caso de Itaipú, el informe SACHS no ha sido utilizado hasta ahora para reclamar nuestros derechos. El referido documento demuestra que Paraguay no debe nada al Brasil, sino por el contrario, hay una deuda a favor de nuestro país. Desde que asumió Cartes el informe fue archivado.
En el caso de Yacyreta, tras 40 años de espera este Gobierno tiene la posibilidad de renegociar el Anexo C del tratado, que nos permitiría vender nuestra energía a precios de mercado. Sin embargo, el Gobierno no ha exigido la revisión del mismo, y para colmo, ha renunciado a la Dirección de la Entidad, prevista para Paraguay para este período en el Anexo A.
En política exterior la sumisión a los intereses extranjeros es tan escandalosa, que solamente puede ser definida como TRAICIÓN A LA PATRIA.
La Reforma Judicial, PRIORIDAD PARA CONSOLIDAR NUESTRA DEMOCRACIA:
Los Progresistas reafirmamos nuestra voluntad de impulsar la reforma del Poder Judicial. No es un simple discurso, sino un compromiso que hemos demostrado en todos nuestros años de vida política.
Hoy más que nunca, cuando Paraguay es sinónimo de INSEGURIDAD JURÍDICA, y vivimos a diario el temor ante la CRECIENTE VIOLENCIA y el peligroso avance del CRIMEN ORGANIZADO en los PODERES PÚBLICOS mientras fiscales y jueces no ven nada y se limitan a perseguir, como nunca antes, a opositores y líderes sociales, se hace prioritario avanzar en reformas en el sistema de justicia.
El Gobierno presiona para cambiar a tres ministros de la Corte como solución al problema de la Justicia, como si eso fuera suficiente. Pero lo peor es que ni siquiera su propuesta puede ser tomada en serio cuando sabemos que lo que se busca es sencillamente un cambio de nombres, para tener una Corte más sometida, siguiendo el modelo del “cuoteo” que nos ha llevado a esta situación.
A este nuevo engaño del Gobierno y sus aliados, respondemos con un llamado a un DEBATE NACIONAL SOBRE LA JUSTICA, CON TODOS, SIN EXCLUIDOS, Y SIN DOBLES AGENDAS. HABLEMOS DE REFORMAS, Y TAMBIÉN DE NOMBRES, PERO NO DE ALGUNOS, SINO DE TODOS. SI VAMOS A SENTARNOS A EVALUAR A LOS MINISTROS DE LA CORTE, QUE SEAN TODOS.
Un PROGRAMA DE GOBIERNO PARA EL TRIUNFO DE LA GENTE:
Los Progresistas confiamos en nuestros compatriotas, creemos en Paraguay.
El país del retroceso, de las mafias, de la corrupción, de la persecución, de la pobreza, del entreguismo, es el Paraguay de una pequeña minoría, minúscula, que se aprovecha del poder para beneficio propio.
EL PARAGUAY DEL 2018 ES EL PAÍS DE LA ESPERANZA, DE LA INCLUSIÓN, DEL PROGRESO, ES EL PARAGUAY DE TODOS, PRINCIPALMENTE DE LOS QUE MÁS NECESITAN.
ES EL PARAGUAY QUE VAMOS A CONSTRUIR CON UN PROGRAMA PROGRESISTA Y CON UNA ALIANZA AMPLIA, LIDERADA POR LOS MEJORES HOMBRES Y MUJERES DE NUESTRA PATRIA.